Fieles a la tradición de excelencia de la Maison, se combinan múltiples formas de artesanía para dar vida a las creaciones florales e impregnarlas de brillo e intensidad. El pulido espejo —una técnica emblemática de Van Cleef & Arpels desde 1920— se elabora a mano pieza a pieza en la colección Frivole® para realzar su resplandor. Las manos virtuosas del artesano se aseguran de que la luz fluya sin impedimentos a través de las creaciones que, como resultado, resplandecen con intensidad sobre la piel.

Fascinada por la belleza de los diamantes, la Maison destaca su pureza con deslumbrantes creaciones de joyería. Las creaciones de la Maison, que se llevan a ambos lados del rostro, en el cuello o en la muñeca, se caracterizan por una elegancia atemporal.

Entre estas piezas, el motivo Fleurette continúa el legado de Van Cleef & Arpels. La colección Flowerlace reinterpreta el motivo floral con cintas brillantes para adornar la silueta con elegancia. Las creaciones de Alta Joyería celebran momentos únicos.

La rosa de Navidad, una de las flores que la Maison lleva utilizando desde 1906, se interpreta desde 1970. Con sus corolas abombadas, sus pistilos de oro y diamantes, y sus combinaciones de piedras ornamentales o materiales orgánicos, esta colección refleja la explosión de color y formas que hizo tan vibrante esta década. 

Van Cleef & Arpels combina su savoir-faire joyero con su gusto por las piedras preciosas para dar vida a las nuevas creaciones Rose de Noël. Las piedras seleccionadas se cortan dándoles volumen y se pulen para acentuar el brillo antes de ser combinadas para garantizar un color uniforme. La experiencia en joyería de la Maison se expresa en cada elemento de oro, creado mediante la técnica ancestral de la fundición a la cera perdida, que posteriormente se reelabora y se pule a mano.