Poderosos símbolos de alegría y esperanza, las hadas y las bailarinas constituyen una tradición emblemática de Van Cleef & Arpels. Dotadas de una gracia etérea, estas figuras femeninas evocan el encantador universo de la Maison.
Un hada, musa protectora y símbolo de feminidad, vigila el poético paso del tiempo ataviada con un vestido de zafiro y diamantes. Sus alas de esmalte plique-à-jour turquesa evocan los matices del cielo estrellado, elaborado en nácar con grabado guilloché y engastado con diamantes.
Delicadamente sentada sobre una nube, señala los minutos con su varita mágica gracias a un movimiento retrógrado. La luna indica las horas en una apertura de nácar ampliada por un halo suave y relajante.
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